lunes, 22 de febrero de 2010

Educación tiene una misión especial

Desafíos. El alto costo de la educación especial, los pocos centros disponibles y la falta de maestros suficientes dificultan a un niño con discapacidad aprovechar sus años escolares. El Ministerio de Educación desarrolla estrategias para lograr su meta de atención a la diversidad.


El nacimiento de Moisés cambió la vida de toda su familia. Su condición de síndrome de down reveló que requeriría del esfuerzo máximo de sus padres para poder desarrollar sus habilidades. Disposición siempre hubo, pero las oportunidades eran muy escasas. Más, cuando se trata del caso de Moisés, que vive en la provincia Peravia.

Su madre se traslada día a día a Santo Domingo para que Moisés no descuide sus terapias. Una inversión que económicamente supera los 20 mil pesos mensuales y, en tiempo significa medio día, entre transporte y horario de clases. Es una suerte que no corren todos los niños con discapacidad. Cumplir con tareas escolares es una ilusión para una gran parte de ellos en el país, sobre todo para los de provincia. Son pocos los maestros y mucho menos los centros disponibles para que todos disfruten de su derecho a la educación. Y lo elevado que resulta en términos económicos, a las familias pobres los aleja más de esa dicha.

“Creo que en el país hay oportunidades. Lo que falta es inversión. Hay iniciativas que no progresan por la falta de recursos. En Baní se construyó una escuela de educación especial pero no prosperó porque no tenía apoyo económico”, explica la madre del pequeño Moisés de siete años, Roselí Peña.

La educación especial es muy amplia. Abarca todo tipo de discapacidad: sordomudos, ciegos, retardo mental, síndrome de down, autismo, entre otras. Pero los que más complicaciones enfrentan son estos dos últimos.

La Asociación Dominicana de Síndrome de Down y la Fundación Dominicana de Autismo coinciden en señalar que faltan maestros para suplir la demanda. Ambas instituciones forman sus propios tutores para apoyar a esos niños.

Acción Estatal. La titular de la Dirección de Educación Especial del Ministeriode Educación, Eulalia Jiménez Canela, expone que agotan un proceso de reorganización. Dijo que están concentrados en evaluar a los niños que entran a las escuelas especiales para confirmar que reciben la atención adecuada.

“Eso implica el funcionamiento de aulas de atención temprana desde 45 días hasta los cinco años para detectar cualquier discapacidad. No podemos ver el problema de la educación especial como un elemento aislado porque es uno de los tantos que hay. Pero claro, esos niños y niñas que presentan necesidades tienen los mismos derechos de recibir una educación de calidad”, indica.

La falta de maestros formados en esta área es también preocupación de Educación, que el año pasado impartió varios seminarios para capacitar a los maestros. “Trabajamos a nivel nacional para que reciban en las escuelas a niñas y niños que no tienen una discapacidad profunda y que puedan adaptarse a una escuela común. Estamos promoviendo el enfoque inclusivo, una herramienta que sirve para atender a la diversidad, darle respuesta a todos los que asisten a la escuela independientemente de sus condiciones”, expresó.
Se han integrado casi 700 niños con discapacidad a las escuelas regulares.
“Estamos haciendo un esfuerzo para que todos los niños estudien juntos pero estamos conscientes de que nos falta todavía trabajar y avanzar más”, indicó.

"El nivel oficial no ofrece nada"
Ada Drullard

La presidenta de la Fundación Dominicana de Autismo, Juana Carpio, y la vicepresidenta, Ada Drullard, afirman que a nivel oficial a esos niños no se les ofrece nada y los centros privados son exageradamente caros. Ante esa situación, una familia de escasos recursos termina dejando al niño en la casa, privado de las terapias que le urgen.
“El autista necesita una atención individual. Nuestra gran preocupación es que no hay nada en los pueblos para ofrecerles a estos niños. Para los autistas es más difícil encontrar escuelas por sus características, ya que muchos niños parecen normales, entonces a veces en las escuelas especiales no los quieren aceptar”, expresa Drullard.

Puntos de atención

*Seis escuelas oficiales dirige el Departamento de Educación Especial de la SEE (La Romana, Santo Domingo, La Vega, Puerto Plata, San Francisco de Macorís, Dajabón y Azua) y 14 semioficiales. Cada centro tiene entre 150 y 400 niños. Tiene dos centros de recursos de atención a la diversidad, en el Distrito Nacional y la provincia Hermanas Mirabal.

*La cantidad de niños con discapacidad es difícil de determinar. En el último censo no se especificó. Pero según estadísticas internaciones uno de cada 700 niños nacido vivo tiene síndrome de down. Mientras que de cada 95 niños uno es autista.

*Ninguna universidad, actualmente, ofrece maestría, postgrados o licenciatura en Educación Especial. Lo que vislumbra lejano que pronto aumente la matrícula de maestros.

Foto: Alexander Ramírez

Publicado en El Caribe

2 comentarios:

Unknown dijo...

se merecen aprender dentro de su condición, que hagan algo ya

Felivia dijo...

En República Dominicana la población con discapacidad necesita apoyo en diferentes aspectos. Ojalá que en lo que se refiere a educación se actúe pronto.

Mary, un abrazo :)